Desear algo.
Luego creer que se puede.
Luego poner algún que otro medio.
Mover un pie.
Otro.
Ver de cerca los síes.
Eso gusta, cuando los síes comienzan a aparecer.
Me encantaba tropezar con ellos.
La alegría que tenía no era la alegría de llegar a algún lado, sino la alegría de creer que estaba llegando.
Eso sí que era bonito...
La canción del findeee jajajaj!!!
1 comentario:
te echo de menos gorda!
1 besazo
Publicar un comentario